Junto a la lucha de Francisco Filippi

04/09/18

Días atrás recibimos una nota enviada por Francisco Filippi, joven futbolista surgido en Colón y con un paso también por el fútbol portugués. Acompañamos a Francisco en un momento duro de su vida y él ha tenido la gentileza de hacernos esta caricia convertida en mensaje, en un gesto que nos emocionó y que, por supuesto, agradecemos profundamente. Este es el testimonio...
“Cómo expresar con palabras todo mi agradecimiento a la gente de la Obra Social de Futbolistas Agremiados. La verdad, me resulta muy difícil, porque no encuentro la expresión exacta. Es tanto que no me va a alcanzar la vida para expresar mi gratitud. Juego al fútbol desde muy chico en el Club Colón de Santa Fe, con el que tenía contrato y en el cual sin embargo no pude tener `la oportunida´ de debutar en la primera división. Pasé muchas frustaciones y amarguras... no es fácil hacer un camino en el fútbol profesional. Tengo que decir que gracias al apoyo de mis padres y de otras personas que me tuvieron fe y que no sé si quieren que las nombre, conseguí que Colón me diera a préstamo al Freamunde de Portugal. Al fin mi sueño de jugar se estaba haciendo realidad. Lamentablemente y después de unos meses en ese club y de un día para el otro me detectaron Linfoma de Hodgkin. Fue un mazazo en mi vida, tuve que abandonar todo para hacer el tratamiento en Argentina, pero con la seguridad de que me iba a curar, que el mal trago iba a pasar. Cuando volví, mi familia y yo estábamos solos frente a esa dura enfermedad que le deja la boca seca a cualquiera. No es fácil de digerir. Y es acá donde tengo que manifestar mi enorme gratitud hacia toda la gente que forma parte de la Obra Social de Futbolistas Agremiados, empezando por la Dra. Stella Reschia, de Santa Fe; el Sr. Raúl Taboada, de la ciudad de Córdoba, donde hice el tratamiento; el Sr. Carlos Pandolfi y por sobre todo Ana María, porque no solamente era hacer trámites para tratar la enfermedad, sino toda la contención afectiva que me dieron desde el primer al último día. Por eso quiero decir gracias, porque fue muy duro, pero estuve acompañado por toda esta gente que me ayudó a sanar, a recuperarme y a volver a pensar en jugar, porque ese es mi sueño, el sueño que esta tremenda enfermedad no pudo quebrantar. Gracias a todos lo que conforman la Obra Social de Futbolistas Agremiados".